SERIE: TOMANDO UNA DECISIÓN INFORMADA - Día 6

Imagen
  Sanidad: cuando el alma vuelve a respirar " Él sana a los quebrantados de corazón, y venda sus heridas ."  — Salmo 147:3 (RVR1960) Reflexión pastoral: Después del dolor, después del arrepentimiento, después del perdón… viene la sanidad. La sanidad no es solo la ausencia de culpa, es la restauración de la dignidad. Es volver a vivir sin temor, sin esconderse, sin tener que fingir que “todo está bien”. Es cuando el alma comienza a respirar de nuevo. Pero la sanidad no ocurre en un solo momento. Comienza con reconocer esa obra perfecta de Cristo en la Cruz del Calvario. Es un proceso guiado por el Espíritu Santo, muchas veces en compañía de personas sabias y amorosas, en espacios de consejería, oración, comunidad y adoración. Es allí donde el corazón herido empieza a recordar que todavía puede latir con propósito. Dios no solo quiere perdonarte y salvarte; Él desea restaurarte , es decir volver a colocarte en Su camino y propósito por el cuál has venido a este mundo. Qui...


 

Creados a Su Imagen: El Fundamento de la Dignidad Humana

"Y creó Dios al ser humano a su imagen; a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó."
— Génesis 1:27 (RVR1960)


Reflexión :

En los primeros versos de la Biblia se revela una verdad profunda: la vida humana no es un accidente cósmico ni una construcción cultural. Cada persona —desde la concepción hasta la muerte natural— ha sido creada con intención y dignidad por un Dios que le imprimió Su propia imagen. Esta verdad no es sólo teológica; es profundamente práctica y urgente.

Vivimos en tiempos en los que la vida humana es cuestionada, negociada e incluso descartada. Se debate su valor en función de su etapa, su utilidad o su "deseabilidad". Sin embargo, desde la primera página de las Escrituras, Dios proclama que todo ser humano lleva en sí la marca del Creador. ¡Eso cambia todo!

Como Iglesia, no podemos guardar silencio ante la desvalorización de la vida. No es sólo un asunto social, político o sanitario; es un asunto espiritual. Guardar silencio es permitir que otras voces definan lo que solo Dios puede definir. Debemos hablar, con amor y verdad, sobre el valor de toda vida, especialmente la más vulnerable: los no nacidos, los ancianos, los discapacitados, los descartados por la sociedad.

Defender la vida no es una opción para el cristiano. Es una extensión de nuestra fe. Es amar a Dios reflejando Su corazón por Su creación. Es ver a cada persona —incluso a la que no ha nacido aún— como un portador de gloria, digno de protección, de amor, de redención.

Desafío:

¿Está tu iglesia enseñando sobre el carácter sagrado de la vida? ¿Estás tú, como líder o creyente, hablando con claridad, misericordia y convicción sobre este tema?

No necesitamos ser expertos, pero sí necesitamos ser fieles. Que cada predicación, cada clase, cada consejo refleje este compromiso: toda vida importa porque toda vida viene de Dios.

Oración:

Señor, ayúdame a ver como Tú ves. Enséñame a valorar la vida como Tú la valoras. Dame valentía para hablar, amor para corregir y compasión para acompañar. Hazme un defensor de la vida, no por ideología, sino por obediencia a Tu Palabra.
Amén.

Comentarios

Publicar un comentario

Si quieres comentar, hazlo para la edificación del Cuerpo de Cristo...

Entradas populares de este blog

INTIMIDAD ANTES DE HACER IMPACTO - PARTE 1