SERIE: TOMANDO UNA DECISIÓN INFORMADA - Día 6

Imagen
  Sanidad: cuando el alma vuelve a respirar " Él sana a los quebrantados de corazón, y venda sus heridas ."  — Salmo 147:3 (RVR1960) Reflexión pastoral: Después del dolor, después del arrepentimiento, después del perdón… viene la sanidad. La sanidad no es solo la ausencia de culpa, es la restauración de la dignidad. Es volver a vivir sin temor, sin esconderse, sin tener que fingir que “todo está bien”. Es cuando el alma comienza a respirar de nuevo. Pero la sanidad no ocurre en un solo momento. Comienza con reconocer esa obra perfecta de Cristo en la Cruz del Calvario. Es un proceso guiado por el Espíritu Santo, muchas veces en compañía de personas sabias y amorosas, en espacios de consejería, oración, comunidad y adoración. Es allí donde el corazón herido empieza a recordar que todavía puede latir con propósito. Dios no solo quiere perdonarte y salvarte; Él desea restaurarte , es decir volver a colocarte en Su camino y propósito por el cuál has venido a este mundo. Qui...

INTIMIDAD ANTES DE HACER IMPACTO - PARTE 3

 


Edificados sobre la Palabra

"Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino.— Salmo 119:105 (RVR1960)


Reflexión:

No se puede edificar vida sobre opiniones personales, ni se puede sustentar un ministerio sobre emociones. Solo la Palabra de Dios tiene el poder de sostener, formar y guiar al corazón del Dador de Vida.

Cuando no estamos fundamentados en la Escritura, nuestras decisiones, aunque bien intencionadas, se deslizan hacia el activismo vacío o el juicio sin gracia. Pero cuando la Palabra habita en nosotros, no solo sabemos qué decir: sabemos cómo decirlo, cuándo actuar y con qué corazón hacerlo.

La Biblia no es solo nuestro manual de argumentos, es nuestro espejo, nuestro pan, nuestra espada y nuestro consuelo. Nos muestra el valor eterno de cada ser humano, nos recuerda la compasión de Cristo por los vulnerables y nos prepara para hablar con verdad y amor.

Un ministerio que no fluye de la Palabra pronto se agotará. Pero quien se edifica en ella, permanece. Escoge hoy cimentarte en ella, meditarla, obedecerla y compartirla.


Desafío:

¿Está tu vida arraigada en la Palabra, o solo la usas como recurso para enseñar a otros? ¿Estás siendo formado por ella cada día?

Haz de la Palabra tu base, tu fuente y tu ancla. Que cada conversación sobre la vida esté empapada de Escritura viva y aplicada.


Oración final:

Señor, gracias por darnos Tu Palabra como guía segura. Ayúdame a edificar mi vida, mi pensamiento y mi ministerio sobre ella en todo momento. Que cada decisión que tome refleje lo que Tú ya has dicho. Hazme un instrumento de vida… porque estoy afirmado en Tu verdad.
Amén.

Comentarios

Entradas populares de este blog

INTIMIDAD ANTES DE HACER IMPACTO - PARTE 1